Pequeñas esferas negras elaboradas mediante esferificación de Aceto Balsámico de Módena IGP de la histórica Acetaia Malpighi.
Dentro de cada perla late un corazón denso y aromático —mosto de uvas Trebbiano y Lambrusco envejecido en barricas de roble— que, al estallar, libera notas de ciruela, pasas, madera y un sutil toque avainillado.
Su elegante brillo oscuro realza carpaccios de ternera, foie gras, quesos curados, fresas o helado de vainilla, añadiendo contraste cromático y una textura explosiva que transforma cada bocado en una experiencia gourmet.