Burdeos reúne tintos de la orilla izquierda (Médoc, Graves) y derecha (Saint-Émilion, Pomerol), elaborados con cabernet sauvignon, merlot, cabernet franc y petit verdot cultivados en suelos de gravas, arenas y arcillas calcáreas. Viñedos influenciados por el Garona y el Dordoña aportan equilibrio y frescura natural.
Las uvas se vendimian a mano, fermentan con levaduras autóctonas y maduran de 12 a 24 meses en barricas de roble francés —entre 40 y 70 % nuevas según château—. Cada vino, desde Grand Cru Classé hasta petits châteaux, muestra fruta negra, grosella, grafito y cedro, con elegancia, estructura y capacidad de guarda.