Recolectada a mano en las históricas Salinas de Añana (Álava), esta Flor de sal en escamas 120 g brota en la superficie de balsas alimentadas por un manantial salino de 200 millones de años.
Las láminas, finas y crujientes, se forman al sol y al viento atlántico antes de secarse de forma natural, conservando más de 80 oligoelementos: calcio, magnesio y potasio realzan el sabor sin exceso de sodio.
Espolvoreada justo antes de servir, aporta textura delicada y un estallido mineral a carnes a la parrilla, carpaccios, verduras asadas o postres de chocolate.
Tarro de vidrio de 120 g con certificación ecológica y sello Euskal Gatza, símbolo de producción artesanal y sostenible.